No sé porque me salen en tik tok, tantos videos de gente pelando huevos crudos. Se tardan horas tratando de desprender el cascaron de la frágil membrana, usando pinzas de depilar, palillos y empujadores de cutícula. ¿Qué será, lo que nos da curiosidad? ¿El eminente fracaso de los ociosos? ¿La solidaridad de perder el tiempo con ellos? Ó ¿Descubrir un nuevo hobbie para la siguiente cuarentena?
La verdad nunca había visto un huevo crudo sin cascarón, conocía bien los huevos, motuleños, benedictinos, revueltos y divorciados. Huevos de rancho, huevos llenos de hormonas, huevos orgánicos y huevos de gallinas de libre pastoreo, había visto huevos morados, encogidos por el frio, huevos peludos y huevos rasurados, huevos holgados en escrotos caídos, hasta huevos pegados. Tanta gente habla de los huevos, cuantas veces no caché a mi primo, ahí nomas, echado rascándose los huevos.
En México en lugar de decir sí, decimos: "¡A huevo cabrón!" expresamos cariño con un: ¡Vales un hueval! Y en vez de jurar por Dios, puedes decir "¡Me cortó un huevo, a que esto es cierto!" Si vas a manejar en mi país, debes aprender a "pintar huevos", no como los cientos de huevos que yo pintaba para Pascua, sino, eso que se pintan con tanto gusto, para mandar a la chingada a alguien. Puedes amanecer y decir — "¡Huevos días, alegría!" O despertar con tanta hueva y quedarte todo el día en pijama, y aun que no tengas huevos, te van a decir "eres una huevona".
No sé cuántas docenas de huevos hayan desperdiciado los creadores de contenido en redes sociales, pero te aseguro que, hoy en la noche, voy a necesitar un par huevos bien puestos para decirte, ¡Huevos tibios, una de dos: ¿o te vas tú o me voy yo? ¡Porque ya tienes hasta el huevo!
Me encanta tu estilo Ana!
ResponderBorrarGracias por compartir!
Podría leer un libro de tus historias
ResponderBorrarEspéralo a final de año!
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